Templanza

Templanza

Aporte del Arcángel Ariel

El silencio del Guardián después de tantos días cesó. Hoy nos trae un gran aporte acerca de la Templanza, que no es más que la capacidad de saber disfrutar la vida y los placeres que ella nos brinda de manera controlada, sin caer en los vicios o adicciones que sólo nos pueden causar daño y envenenan nuestro ser interior. Como nota curiosa, días anteriores tuve la visión del Árbol brillando y sobre él estaban los Guardianes, quienes me indicaron el pronto regreso de sus aportes a este blog y a nosotros mismos. La experiencia del dia de hoy estuvo cargada de mucha luz, energía, vitalidad incluso. Sin más preámbulos, el aporte de Ariel:

La estancia terrenal está provista de grandes placeres, únicos en éste plano y que fácilmente capturan al que a él pertenece.

Si bien es cierto que no hay vida igual a la que vives ahora, y tienes no sólo la libertad sino también el derecho de tu conciencia a disfrutar de los placeres de los cuales dispones, existe algo muy cierto y a la vez tormentoso para el alma. Se llama exceso y éste te dirige a otro camino que se llama vicio, cuyo destino no es más que la destrucción.

Placeres que en tu existencia más sutil no has podido ni podrás disfrutar son alcanzables por tí en éste momento y tu escoges tenerlos, por eso ninguno de mi familia está en posición de juzgarte; si no posees la moderación que necesitas dañarás tu ser, alejarás a quienes te aman incondicionalmente y tu progreso se detendrá. Tu parte de la cosecha se perderá irremediablemente. El vicio daña tus proyectos, no abras tu corazón a él, serás amigo del enemigo y como tu elección es esa, no existirá remedio en la tierra, ni sobre ni debajo de ella.

No podría sugerir que te abstengas de todo placer porque eso te lleva a la frustración. En cambio sé que hay un camino para vivir bien sin dejar de disfrutar la vida. Se llama "Templanza". Practícala y tendrás satisfacción sin dañarte ni dañar a los demás. Conviértete en entendido, busca y aplica su significado en tu vida.

Ora al Padre siempre, dale gracias por todo lo que te provee, dale gracias por esos placeres de los que dispones y pídele sabiduría para aprovechar con mesura todas las satisfacciones que el mundo proporciona a quien vive en él.

Yo Soy el Cambio, los amo a todos.

Mensaje recibido el día Miércoles 20 de Agosto de 2008, a las 06:34 p.m.